El Monte Bombolí en lengua Tsáfiqui significa “lugar sagrado”. Antes de la colonización los nativos creían que en ese lugar vivían los dioses, por eso enterraban allí a sus caciques que fallecían para que estén junto a las deidades. Con esa creencia realizaban cultos y rituales, llevaban ofrendas a los dioses y a los muertos. Los diferentes hallazgos arqueológicos encontrados en esta zona argumentan esta información, señaló, Manuel Calazacón, curandero de la etnia tsáchila.
MORADA DE DIOSES
Los nativos observaban que cada vez que anochecía bajaba la niebla y cubría la cima del Monte y al amanecer se despejaba, eso les hizo pensar que los dioses descendían del cielo para comunicarse con los hombres, y los diferentes sonidos que emitían las aves y animales del lugar, parecían las voces de los divinos, por eso creyeron que era un lugar sagrado.
COMPARABAN
Al Monte Bombolí le han comparado con el Monte Olimpo, considerado como la morada de los dioses griegos y con el Monte Sinaí, el lugar donde Dios entregó a Moisés la tabla de los 10 mandamientos, pero con la llegada de los colonos esta calificación “sagrado” que la tribu de los indios colorado dio a Bombolí, se perdió definitivamente.
PARQUE ECOLÓGICO
Después, el Monte Bombolí fue señalado como un lugar con ecosistema selvático, donde se extraía madera y se cazaba animales silvestres, pero el Monseñor Emilio Lorenzo Steele, cambio esa idea y propuso que este sitio sea un Parque Ecológico con el objetivo de concienciar a los jóvenes para proteger la ecología y el medio ambiente.
RECIBIÓ SEÑAL
Según los historiadores, el Monseñor Emilio Lorenzo Steele habría recibido la señal del cielo para crear el Parque Ecológico. Esto sucedió con la visita de la Virgen del Cisne a la ciudad de Santo Domingo de los Colorados en el año 1993. Luego, interpretaron el sentir fervoroso de la fe católica vivida en esa fecha con la presencia de la “Churona” y el deseo expreso de las autoridades civiles de ese tiempo de honrar la visita de la Virgen a esta Ciudad, se ordenó construir el Santuario a la Virgen del Cisne en el Monte Bombolí.
IMPACTO NEGATIVO
Ahora, aquel el mítico monte sagrado, que fue cuna de los dioses, lugar muy respetado, por los pueblos originarios de ayer, luce llenas de viviendas por sus faldas y con poca vegetación. Establecer el santuario de la virgen en la cúspide del Bombolí, resultó un impacto negativo que acabó con la belleza natural del monte.